Logotipo AMALAJER

fuente: abc.es

Javier Cárdenas presenta diariamente en TVE un espacio de entrevistas en el que tienen lugar los temas más variopintos. En «Hora Punta», Cárdenas se dispone a disolver casos de todo tipo, siempre en busca de historias atractivas para el público y con su punto de morbo.

Para el primer programa de esta semana el periodista llevó a plató a Carlos Lobato para hablar de un tema de máxima actualidad y trascendencia: la adicción a los videojuegos. Y es que Lobato, que ahora colabora con la Asociación Malagueña de Jugadores de Azar en Rehabilitación, es un exadicto a los videojuegos que llegó a pasarse 48 horas seguidas frente a una pantalla.

«Los videojuegos, que son muy recomendables para algunas cosas, pueden causar mucho daño», advirtió Cárdenas, que también invitó al programa a Rubén Blasco, psicólogo experto en adicciones. La historia de Lobato dejó a todos de piedra: Carlos siempre había sido un chico sociable, aplicado en los estudios y que además iba al conservatorio. Pero todo cambió cuando sus amigos empezaron a utilizar videojuegos, y él poco a poco fue enganchándose.

«Llegué a engordar 25 kilos, no me lavaba y descuidaba mi higiene, empezó el descontrol con mis relaciones personales...», explicó el joven, «mis padres intentaban que me diera cuenta del problema pero yo les decía que estaban locos». Poco a poco la cosa fue a más, y acabó teniendo «discusiones muy violentas con mios padres, porque yo me ponía agresivo cuando intentaban quitarme la consola: lo único que quería era jugar, no escuchaba a nadie».

El psicólogo Blasco explicó que «cuando una persona se hace adicta de algo, ya sea una sustancia o algo conductual, tiene muchas más probabilidades para acabar siendo adicto a otra cosa». Por su parte, Lobato le contó a Cárdenas que para atajar el problema «se trata de educar y de saber usar la tecnología. Yo ahora me estoy rehabilitando y vuelvo a ser una persona diferente. Jugando a videojuegos perdía totalmente la noción del tiempo, a veces ni veía el sol».