Un 7% de la población padece el trastorno de compra compulsiva, que se da en la misma proporción en hombres y mujeres, según ha informado hoy el Hospital de Bellvitge.

El centro catalán es pionero en el tratamiento de este trastorno y lo hace atendiendo otros problemas asociados al síndrome, como el estrés o las alteraciones emocionales. El hospital aplica un programa de tratamiento protocolizado e integral para tratar a estas personas y atiende a los pacientes no solo desde una orientación cognitivo-conductual, sino que también asiste a la familia.

La responsable de la unidad de juego patológico y otras adicciones de Bellvitge, Susana Jiménez, ha explicado que "depresión, problemas de ansiedad y trastornos alimentarios son en la mitad de los casos trastornos vinculados con la compra compulsiva que deben tratarse para lograr la total recuperación del paciente". La terapia también ayuda al paciente en cuestiones financieras y gestión de las deudas.

AUMENTA EL MATERIALISMO
Según esta especialista, la incidencia del problema es similar entre hombres y mujeres, aunque "la diferencia se encuentra en el tipo de objetos que adquieren, mientras las mujeres compran cosmética, ropa, complementos y joyas, los hombres suelen comprar material informático, música y accesorios para el coche".

"La influencia de la publicidad, el aumento del materialismo como indicador de éxito social e, incluso, como señal de identidad y las facilidades que cada vez más tenemos para comprar cualquier tipo de producto son factores que favorecen el incremento del número de pacientes con trastorno de compra compulsiva", asegura Susana Jiménez.

En los últimos años, internet se ha establecido como un potente elemento de riesgo en el desarrollo de esta patología, aunque las compras presenciales siguen siendo las más habituales.

DEUDAS DE MÁS DE 25.000 EUROS
"El perfil del paciente es una persona de unos 40 años, con un tiempo de evolución del trastorno de seis años y con deudas de más de 25.000 euros", según Jiménez. Según la experta, déficits en el control de los impulsos y dificultades en la regulación de las emociones negativas son predictores muy significativos en el desarrollo y mantenimiento de esta conducta.

Otros factores de riesgo individuales como determinados rasgos de la personalidad, estados depresivos o de ansiedad, baja autoestima y déficit en el manejo del estrés son también variables implicadas en la etiología del trastorno de compra compulsiva.

El Hospital de Bellvitge forma parte del Health Universitat de Barcelona Campus (HUBc), una alianza o 'hub' que engloba a 30 entidades dedicadas a la formación, la investigación y la transferencia de conocimiento en el terreno de las ciencias de la salud.